jueves, 16 de febrero de 2012

In principium erat…

Este post comienza con las primeras palabras de la Biblia porque las primeras palabras que nos han de venir a la mente cuando nos disponemos a maquillarnos  han de ser sagradas: cuidado de la piel.
Antes de aplicar la base de maquillaje, nuestro rostro  ha de estar en condiciones óptimas, no solo para lucir un look lo más bonito posible, sino también para mimar nuestro lienzo, para que éste esue ePr nuestro lienzo, el rostromnuestro rostrro  ser sagradasprimeras palabras que nos han de veeniresesestéesté preparado para recibir durante un tiempo más o menos dilatado una sustancia que le es impropia.

PASO 1: limpiar la piel
Existen muchos productos en el mercado para eliminar las impurezas de la piel. Yo, ahora mismo estoy usando una jabón facial de BobbiBrown (existen jabones faciales en muchísimas marcas). Para aplicar jabones faciales debemos tener el rostro húmedo (es preferible que el agua esté cliente para que los poros se nos dilaten y así facilitar la expulsión de restos e impurezas). Con una pequeña cantidad de producto, masajeamos el rostro, para luego retirarlo con agua caliente. En mi caso, el jabón de Bobbi no me deja la piel en absoluto tirante, sino suave e hidratada. ¡Estoy encantada con él!


Cuando estoy más perezosa, uso mi esponja konjak. Mi  esponja es de Kiko cosmetics y costó unos 6 €. Aunque su función es la misma que la del jabón facial, noto que me deja la piel más incómoda.



PASO 2: tónico
Alivia la pequeña agresión que supone el paso anterior y prepara la piel para recibir hidratación. Estoy usando el tónico de la misma marca que el jabón facial, y, además de  cumplir a la perfección su función, tiene un olor a hierbas muy agradable.



PASO  3: hidratación
Para antes del maquillaje, suelo usar esta crema de Bioderma que matifica mi piel mixta y es bastante ligera al mismo tiempo, lo cua es ideal para antes del maquillaje. La elección de hidratante es un mundo, depende del tipo de piel  y del resultado que se busca con el maquillaje. ¡Por cierto! No olvidéis hidratar una de las zonas más sensibles del rostro: el contorno de los ojos… ¡fundamental!



PASO 4: prebase
Este paso es opcional. Cuando queremos por cualquier motivo que nuestra base de maquillaje se mantenga intacta el mayor tiempo posible, podemos recurrir a las prebases. Os pongo una fotografía de esta prebase de MAC que va muy bien peeeero… ¡ ohhh! contiene siliconas, lo que quiere decir que no deja transpirar nuestra piel. Por eso yo lo reservo para ocasiones puntuales. NARS también tiene una que no contiene siliconas y da, no obstante, un resultado increíble, ¡os la recomiendo!
Normalmente, para diario uso como prebase un producto multiusos: el Fix Plus de MAC. Es un spray o bruma que, entre otros usos, ayuda a fijar la base de maquillaje tanto antes de su aplicación, como después.
nico
: te.noto que me deja la piel moluto tirante, sino suave e hidratada. l.


lunes, 23 de enero de 2012

Colorful





   Uno de los looks que he realizado de los que me siento más orgullosa. Desde luego, es muy colorido y no apto para las que desean pasar desapercibidas. Sin embargo no deja de ser muy elegante, a pesar de combinar unos ocho colores diferentes para lograr el difuminado lo más semejante posible a mi fuente de inspiración: la pluma de pavo real.
   En cuanto al rostro, colorete coral, uno de los que más favorecen a los tonos de piel medianos y gloss haciendo juego. Un resultado jugoso, fresco, desenfadado... ¿Qué os parece? ¿Os atreveis con el look?

domingo, 15 de enero de 2012

Los tres productos imprescindibles del 2011


  • Para comenzar, una buena base que nos deje la piel como siempre hemos soñado....








    Suena utópico, quizás demasiado perfecto para ser verdad, pero no. La Perfect Refining Fundation de Shiseido se acomoda a la piel perfectamente, cubriendo de manera asombrosa las imperfecciones de la piel (incluso las rojeces más peleonas). Sin embargo, y a pesar de ser una base tan cubriente, no "pesa" nada en el rostro ni deja una apariencia acartonada sino más bien sedosa, como si ya hubiéramos aplicado los polvos para sellarla.... ¡Increible!


  • Nunca había introducido un corrector entre mis productos favoritos. Lo cierto es que, debido a la oscuridad de mis ojeras hereditarias (gracias, mamá), ni siquiera el Studio Finish de Mac llegaba a convencerme del todo... Aunque he probado el corrector de Bobbi Brown con su precorrector incluído, creo que el corrector salmón de Martora (50133) es, sin duda, el mejor de cuantos he tenido.







  •  
    Se trata de un corrector en crema muy cubriente, que elimina casi por arte de magia la oscuridad de aquellas que tenemos las ojeras más conflictivas. Nunca antes había tenido la sensación de verme los ojos más grandes al usar el corrector... la verdad es que no lo cambio por nada. Eso sí, no tiene diferentes tonalidades, debes matizarlo usando tu base de maquillaje para igualarlo con el tono de piel.



     

    Os pongo un swatch del corrector sin difuminar en mi mano. Es un buen ejemplo, porque tengo unas venas muy marcadas y verdosas. Casualmente puse el corrector sobre una de ellas y si os fijáis no se aprecia en absoluto la tonalidad verde de la que os hablo.



  • Otro producto totémico que me ha dejado el 2011 ha sido el colorete Madly.







     Puede parecer aburrido a primera vista... de hecho yo misma soy gran fan de los coloretes de colores llamativos como el Desiree o el Taj Majal (estos dos también de Nars).



    Cuando entra en contacto con la piel el Madly adquiere un matiz rosado precioso. Casi no lo hay que trabajar para que te quede precioso y lleva unos finísimos destellos que aportan una luminosidad al rostro tan bonita que se ha convertido en mi colorete "X", y no porque me guste dar nombres gamberros a mis coloretes, como hace François Nars, sino porque es al que recurro cuando se me plantea una incógnita. Todo un must have.